domingo, 17 de mayo de 2015

EL PAN ES EL MEJOR REMEDIO


 

EL PAN ES EL MEJOR REMEDIO

 

Para remediar el hambre,

nada como el pan,

sí, pan, pan, siempre pan,

sencillo, rotundo, definitivo.

De ahí que me digo, que te diga, que nos digamos:

resulta incomprensible,

o mejor, inaceptable,

que deseemos la paz y demos el hambre.

Bien por guerras,

especulaciones, desigualdad,

esclavitud, explotación,

(el capítulo de aberraciones queda abierto)

el hambre se robustece

arruga las tripas, la ética,

agrieta las cúpulas de la dignidad

y dinamita la supervivencia.

Se puede consultar a médicos, nutricionistas,

sanadores, anacoretas;

organizar jornadas y congresos temáticos;

promover cenas benéficas,

o crowdfunding solidarios;

elevar rogativas;

apelar a organismos internacionales;

acudir a prácticas esotéricas,

o a intrincadas razones de la razón;

y cualquier otra filantropía.

Pero por encima de todo

(nunca lo olvidemos):

para remediar el hambre,

nada como el pan,

pan, pan, pan,

simple y llanamente pan.

 

Manuel Camuñas